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domingo, 20 de diciembre de 2009

¿Por qué el Faust de Goethe puede ser entendido como el Übermensch (Superhombre) de Nietzsche y cuales son los problemas de una concepción tal del ser

I.- Introducción

En esta parte introductoria sólo ofrezco las obras en las que muestran su filosofía e inclusive algunas teorías, sin embargo será en la siguiente parte en la que se profundizará en el tema de la concepción antropológica y finalmente haré una comparación entre ambas percepciones.

Goethe y Nietzsche, uno escritor el otro filósofo, han sido hitos en sus ramas debido a su innovación de pensamiento. Goethe, como bien sabemos escribió: Las desventuras del joven Werther, Hermann y Dorotea y Faust (su obra máxima) entre otras, siendo esta última la que nos corresponde desarrollar en este ensayo. Nietzsche en su obra tiene aproximadamente 13 trabajos, siendo las mas importantes: El origen de la tragedia, La gaya ciencia, Ecce homo y su obra capital Así habló Zaratustra, obra en la que plasma su idea del Übermensch. Ambos hicieron un intento profetizador, Nietzsche acertadamente creó un sistema filosófico antisistemático y de carácter controversial (por el uso de alegorías). Marx, Freud y Nietzsche son considerados autores de la sospecha, es decir, siempre responden a una pregunta con su procedencia (de dónde vienen) y no con su esencia (qué es); En una parte de su filosofía presenta una concepción antropológica que pretende un cambio radical en la estructura social así como en la esencia del hombre. Por su lado Goethe nos presenta a un hombre espiritual en busca de un solo momento que lo satisfaga.

II.- Faust

“No me igualo a los dioses. Harto lo comprendo. Me asemejo al gusano que escarba el polvo, y mientras busca allí el sustento de su vida, le aniquila y sepulta el pie del caminante.” El Fausto es el prototipo del hombre renacentista; presentado como un doctor que lo sabe todo, harto de todo conocimiento terrenal, está en busca de un momento que lo llene. En el principio de la obra, Fausto invoca al espíritu (dimensión humana capaz de producir) y es cuando se da cuenta que como decía Pascal, el principal problema de la razón es admitir que no puede aprender todo por lo tanto se advierte miserable. Fausto desesperado vende su alma a Mefistófeles a cambio de un momento sublime, tras una larga búsqueda Fausto encuentra ese instante en la persona de Margarita, joven puritana que duda de la procedencia de los actos de cortejo de Fausto.
Fausto, antes de ser tentado por Mefistófeles era un hombre recatado, estudiado, lejano de los placeres terrenales. El Fausto de cumple con las características del ideal científico nietzscheano, que en resumidas palabras nos dice que concibe el ideal humano como sabiduría. El hombre sabio conoce la realidad al desnudo, con todas sus miserias, libre de prejuicios. En lo que difiere es en la afirmación enérgica de la vida.
El protagonista de Goethe (Fausto) es un hombre que no carece de espiritualidad, es eso lo que lo hace diferente a los hombres de ciencia, ya que usualmente el hombre estudiado siente que es superior a lo suprasensible. Es un hombre desesperado que lo único que desea es sentir de nuevo un momento que lo haga ser feliz, mismo que encontrará en un estadio estético (Kierkeggardiano) en el cortejo de una dama.
El problema de una concepción así del ser humano es que la persona tiende a la angustia al ver que su razón no lo puede todo, por ende acude a la espiritualidad para que le ayude a solucionar un problema existencial. Entonces ¿Dónde queda la libertad del hombre? Anulada, ya que la facultad natural que tiene el hombre de obrar de una manera o de otra, (y de no obrar) queda relegada a otra persona aparentemente ligada con la interioridad quimérica de la persona misma.
De alguna manera se puede equiparar a Faust con el Übermensch nietzscheano en que es un ser humano libre y autónomo además de pronunciarse por encima de todos. Difiere en aspectos como la animalidad, el teísmo y la protección a la vida.

III.- Übermensch

Para este apartado, me gustaría hacer una comparación entre el “Mann” y el “Übermensch” nitzscheano; El Mann es un hombre a medio hacer, un puente entre la bestia y el Übermensch, un ser indeterminado, híbrido, heterogéneo, mezcla de animalidad y humanidad, una enfermedad en el universo.

<> (Así habló Zaratustra.)

La única diferencia entre el animal y el hombre es que este último está tornado al futuro, es decir, “el hombre en virtud de su radical espontaneidad, concibe ideales, metas, destinos. Tres han sido las versiones del ideal humano: El estético, el científico y el superhombre.” El primer ideal está reflejado en El origen de la tragedia; donde el ideal humano es interpretado como tragedia. Además de introducir los conceptos de lo apolíneo y lo dionisiaco. El segundo ideal, el científico está explicado en la parte de Faust y por último el Übermensch que personifica el valor supremo de la vida, siendo su más alta manifestación la voluntad de poder y dominio; del cuál se hablará a continuación.
El resultado de un proceso evolutivo que finaliza en un niño. Ese es el Übermensch, el hombre evolucionado en camello, luego en león terminando en un niño con neo características. En su libro Así habló Zaratustra, Nietzsche dicta cómo debe ser el hombre evolucionado. Así las características son claras y distintas. El superhombre es el amor a la vida, el sentido de la tierra, la exaltación de los sentidos ascendentes, es un ser superior, libre de los valores pasados, autónomo, agresivo y legislador, voluntad de dominio, voluntad creadora de nuevos valores, representante del fin supremo de la humanidad.

<> (Así habló Zaratustra.)

Para Nietzsche la religiosidad del hombre era un factor vital para el poco desarrollo que se tiene o tenía (del hombre), entonces para que el hombre devenga en superhombre debe expulsar de su interior a Dios. No se trata de una divinización del hombre, sino todo lo contrario, una sustitución de Dios por el superhombre. De está forma se convertirá en un ser con plenitud de poder y dominio sobre sí y sobre los demás.
Ahora bien ¿cómo pasar de hombre a superhombre? Por medio de la voluntad de poder. Esta voluntad al igual que la vida tiende a la expansión, al dominio, agresión y sometimiento de todo lo ajeno. El proceso evolutivo de la especie humana tiende a la producción de individuos fuertes y superiores, y no al beneficio de la especie.
“No es de extrañar que Nietzsche tratara de inspirarse en algunos temas de la filosofía presocrática. En los presocráticos, y principalmente en Heráclito, creía encontrar una filosofía viva que el racionalismo de Platón había venido a desterrar del mundo. De ahí que Nietzsche insista en uno de los mitos más antiguos de la humanidad, aquel mito del eterno retorno que, del fuego al fuego, repetía, en Heráclito, el curso de cada uno de los grandes años.” , aunque la teoría del eterno retorno de lo idéntico no me incumbe en esta ocasión no podía dejarlo de lado. De lo anterior puedo rescatar que Nietzsche va en contra de lo racional e impulsa la animalidad. Si Descartes hubiese sido del s. XIX seguro hubiera sido eterno rival de Nietzsche, el uno es antitético del otro, Descartes hizo uso de “la luz natural” (la razón) para su filosofía, cosa reprobable para Friederich ya que él nos invita a seguir nuestra propia naturaleza.
El Übermensch es un intento de reconciliación y neovalorización del hombre, Nietzsche intenta que el hombre sea el centro del universo, la vida misma; para eso hace uso de una teoría del tipo evolucionista que culminará en está representación del nuevo hombre, uno totalmente diferente al que somos.

IV.- Problema de la concepción de ambas teorías

El Fausto de Goethe es a lo que todo hombre de ciencia quisiera llegar. El conocimiento de todo lo terrenal es el fin último de las personas que quieren conocer la verdad, aunque no lo piensen y su fin sea otro, este (fin) último viene implícito en la humanidad. Dios le ha otorgado la razón al hombre para que descubra lo que Él ha creado. Fausto abarca todo tipo de conocimiento, a partir de ahí es cuando ya nada le place y mucho menos le llena. Lo que Fausto necesita es un nuevo conocimiento ¿acaso el de un misterio divino?
El problema de la concepción del protagonista de Goethe es el siguiente: la razón de Fausto ya ha aprehendido todo acerca de las ciencias, ahora necesita de un saber superior al común, esto es, un conocimiento divino o al menos un instante inolvidable. Nosotros como personas no debemos de buscar un sólo momento de felicidad absoluta, sino que debemos de vivir la vida como se vaya presentando, (con sus angustias o felicidades) o tal vez algún día nos cansemos de esperar ese momento y la vida se nos vaya sin motivo alguno.
Si estamos esperando de algún mensajero divino una señal de Dios o de algún otro ente suprasensible estamos perdiendo el tiempo, las señales creo yo se dan diariamente en ámbitos totalmente distintos al de la ciencia; nuestra razón no lo debe de abarcar todo ya que perderíamos ese deseo del hombre de conocimiento.
Por otro lado Nietzsche y su superhombre tienen un grave error, tratan de sustituir a un Dios que vive en las mentes de la mayoría de las personas en el mundo. Nietzsche creó a un personaje que en caso de que fuera religioso yo le llamaría egoteísta, ya que “Dios ha muerto” ahora el que lo vendrá a suplir un hombre será. Otro de los errores es ignorar la racionalización del hombre, Nietzsche nos llama a seguir el impulso animal, mismo que nos llevaría a grandes catástrofes sociales.

V.- Conclusión

Tanto Goethe como Nietzsche buscan un avance social, cada uno de su manera. Goethe a su muerte reclamaba “Mehr Licht” (mas luz), lo que quería era que en especial la juventud hiciera más investigación y fuera más crítico en cualquier ámbito. Por su lado Nietzsche buscaba erradicar totalmente la religión y en especial al cristianismo al que le dirige las siguientes palabras: El cristianismo fue desde el comienzo esencial y fundamentalmente disgusto y saciedad de la vida, odio al mundo, miedo a la belleza, un más allá inventado para calumniar lo de aquí abajo.
No se trata de sentenciar al hombre de Nietzsche, deberíamos de aplaudirle por tener esa visión humanista también por tratar de elevar al hombre a un grado divino. Para Goethe no quedan más que elogios, su obra es de las que se traducen en diversas lenguas y estoy seguro que será recordado por los siglos de los siglos.
VI.- Bibliografía


Arnau, H.; “Temas y textos de filosofía”, Universidad, México, 1988, p. 394 p.p.
Goethe, Johann; “Fausto”, EMU, México, 2006, p. 270 p.p.
Xirau, R.; Introducción a la Historia de la Filosofía, UNAM, México, 1990, p. 494 p.p.

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